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Programa popular para la liberación nacional

Resolución del II Congreso Nacional del Partido Socialista Popular, 5 y 6 de Julio de 1975.

 

PROGRAMA POPULAR PARA LA LIBERACION NACIONAL

El problema fundamental de la Argentina es la dependencia que sufre a manos de los monopolios extranjeros, la que se encuentra facilitada por la existencia de una oligarquía terrateniente en general asociada a ellos.

A lo largo de nuestra historia este dependencia ha lesionado los intereses de las mayorías nacionales, y fundamentalmente de los trabajadores, a través de una planificación de nuestra economía que determina el alejamiento de las posibilidades de educación, salud y vivienda para todos, el abandono y empobrecimiento del interior de nuestro país y el desconocimiento de la Soberanía Popular mediante golpes de estado a los gobiernos elegidos por el voto popular.

Para terminar con la dependencia, el Segundo Congreso Nacional del Partido, propone al Pueblo Argentino su programa de Liberación Nacional, que partiendo de la nacionalización de los monopolios extranjeros y la expropiación de la oligarquía terrateniente deje en manos de los argentinos la decisión de los destinos de nuestra patria para poder concretar el bienestar, la libertad y la independencia nacional.

En el camino de lograr los objetivos señalados el Partido propone:

I- En lo económico: independencia económica.

II- En lo laboral: asegurar una legislación que posibilite mejorar las condiciones de vida y trabajo garantizando la vivienda, salud, educación, el descanso semanal y recreación de los trabajadores y un régimen de remuneraciones que acreciente la participación de los trabajadores en la renta nacional.

III —- En lo social: vivienda, educación salud y cultura para todos. Regímenes de protección a la familia, a la niñez, a la juventud, a la mujer y a la ancianidad.

IV — En lo político: vigencia plena de la soberanía popular. Respeto de los derechos y deberes ciudadanos establecidos por la ley.

V — En lo nacional: superación de las diferencias existentes entre la Capital y el interior y entre la ciudad y el campo.

VI — En lo internacional: relación con todos los países del mundo, sobre la base del respeto a la soberanía política y a la independencia económica de la Nación. Participación activa en el Tercer Mundo y fortalecimiento de las relaciones con los pueblos que lo integran.

I. INDEPENDENCIA ECONÓMICA

1. Construcción de una economía independiente:

Las grandes fábricas, las grandes extensiones de tierra, las grandes minas, las grandes organizaciones dedicadas a la pesca, los grandes bancos, las grandes compañías de seguros y reaseguros, importantes servicios de transporte y comunicación, importantes firmas de importación y exportación, importantes firmas que distribuyen las mercaderías y los productos en el interior del país, de empresas que realizan las ventas mayoristas, se hallan controladas por el capital extranjero, que realizan en su exclusivo beneficio la explotación del trabajo de las mujeres y hombres argentinos y de nuestras riquezas naturales.

Esta realidad configura nuestra dependencia.

Los capitales extranjeros que actúan, en nuestro país, pertenecen fundamentalmente a firmas radicadas en los EE.UU.; ellos realizan —en su exclusivo interés—  la planificación de nuestra economía al margen de las grandes mayorías nacionales.

Como la renta nacional es un sola, los planes que benefician los intereses de los capitales extranjeros, son contrarios a los intereses de los trabajadores, de la clase media y de la pequeña y mediana empresa de la ciudad y del campo.

Consecuentemente los planes que benefician a las mayorías nacionales y a nuestro desarrollo económico independiente, chocan con los intereses de los capitales extranjeros.

Por esto la realidad económica de nuestra Patria, se caracteriza principalmente por el choque existente entre los intereses de las mayorías nacionales y los intereses de los capitales extranjeros y de la oligarquía terrateniente, en general asociada a ellos.

En nuestro país la oligarquía terrateniente que asienta su poder en las grandes extensiones de tierra que posee y particularmente en la región de la pampa húmeda, ha actuado y actúa en muchas oportunidades como vocero de los intereses extranjeros y como brazo ejecutor de su política económica.

Los intereses monopolistas y oligárquicos impulsaron el desarrollo unilateral de la economía nacional, la que por mucho tiempo se redujo a ser proveedora de materias primas de origen agropecuario en el mercado internacional.

La industria que surge más tarde dentro de la estructura antes mencionada, no modifica el carácter dependiente de nuestra economía.

Este proceso de dependencia que nace en la colonia y continúa hasta nuestros días, tiene etapas de agudización cuyas expresiones políticas fueron los golpes de estado de 1930, 1955 y 1966. Cada una de estas fechas marcó un avance de los monopolios extranjeros en la expropiación de las riquezas argentinas y una consecuente postergación en las posibilidades de educación, salud y bienestar de nuestro pueblo.

Una organización de la economía que funciona de acuerdo con la planificación realizada por las empresas monopolistas, tiende a incrementar al máximo las utilidades de las mismas, para girarlas al exterior en la mayoría de los casos y en los menos, reinvertirlas en el país para aumentar su poderío y consecuentemente su acción deformante. Esta organización lesiona las bases sobre las que debe asentarse una economía independiente, porque utiliza las fuerzas productivas del país en beneficio del extranjero, en vez de poner factores económicos extranjeros al servicio del desarrollo autónomo de la economía nacional.

Esta situación reserva al pueblo —único y auténtico productor de riquezas— un papel de espectador y ejecutor pasivo de las decisiones que se toman sin su activa participación y en contra de sus intereses.

El pueblo, para construir una economía nacional independiente y al servicio de las grandes mayorías nacionales, debe asumir en plenitud su rol protagónico y romper nuestra realidad dependiente nacionalizando los monopolios extranjeros y expropiando la oligarquía.

2. Planificación popular de la Economía:

La planificación económica actualmente en manos de los monopolios extranjeros y la oligarquía terrateniente pasará a manos del pueblo dejando de constituir un instrumento de dominación sobre las mujeres y hombres de nuestra Patria y transformándose en una palanca decisiva para alcanzar el bienestar, la libertad e independencia nacional.

Con la participación activa de todos los sectores populares y con la orientación de los trabajadores se asegurará la liberación y aplicación de la capacidad creadora y realizadora de los integrantes de las mayorías nacionales; la explotación plena y racional de los recursos naturales y la protección del medio ambiente teniendo como objetivo fundamental la satisfacción de las necesidades materiales y espirituales de las mujeres y hombres de nuestra Patria.

El Estado democrático y popular será el fiel ejecutor de las decisiones de las mayorías nacionales y ejercerá en nombre del pueblo el poder de decisión sobre la política económica.

El Consejo Económico Social tendrá activa participación en la planificación económica. La Confederación General del Trabajo y las organizaciones empresariales de la ciudad y del campo tendrán asimismo participación directa en la proyección y realización de la planificación económica. Dicha participación se operará a todo nivel, desde las fábricas y establecimientos agrícola-ganaderos hasta el nivel nacional correspondiente de la organización obrera y empresarial,

3. Áreas de la economía:

En el objetivo de la Liberación Nacional el Estado, en la planificación de la economía, reconocerá las siguientes formas de propiedad: Social, cooperativa y privada.

Área Social: El área social de la economía quedará integrada por las actividades desarrolladas por el Estado a través de sus empresas en:

a) Las finanzas del país, en especial la banca, los seguros y reaseguros;

b) El comercio exterior, elevadores de granos, frigoríficos y puertos;

c) Las empresas estratégicas de la circulación y distribución;

d) La extracción, industrialización y comercialización de los materiales energéticos a excepción del carbón de leña;

e) El transporte ferroviario y las principales líneas y sistemas aéreos, marítimos, fluviales y terrestres;

f) La radio y televisión;

g) Las comunicaciones;

h) La siderurgia básica, petroquímica y química pesada;

i) Los minerales estratégicos;

j) Los servicios públicos.

Área Cooperativa: El área cooperativa será estimulada y ayudada en su desarrollo. El Estado fomentará y controlará la agrupación voluntaria en cooperativas de trabajo, producción, consumo, crédito, abastecimiento y venta.

Área Privada: El área privada de la actividad económica comprende aquellos sectores del comercio, la industria, la minería y la agricultura, no incluidos en el área social y cooperativa. El Estado, de acuerdo con la ley, protege el derecho de propiedad privada y demás actividades económicas y profesionales.

La actividad del área privada, encuadrada dentro de la planificación nacional de la economía, tenderá al ordenamiento paulatino de su producción de acuerdo con las necesidades del país.

La planificación económica garantizará seguridad y estabilidad al desarrollo de las pequeñas y medianas empresas de la ciudad y del campo, asegurando la colocación progresiva de su producción a precios fijos y remunerativos.

Las actividades económicas localizadas en el interior del país tendrán regímenes preferenciales en materia de fletes, abastecimientos y servicios. La pequeña y mediana empresa será jerarquizada como elemento esencial de la actividad económica nacional.

El Estado garantizará a las pequeñas y medianas empresas asistencia financiera consistente en préstamos a interés reducido y asistencia técnica y de servicios necesarios para que pueda cumplir con la importante función que desempeña en la economía nacional.

4. Asentar la independencia económica sobre la base del ahorro nacional:

Acerca de la financiación del proceso económico que convierte un país dependiente en un país independiente, existen dos posturas fundamentales: La de quienes sustentan la necesaria financiación externa de este proceso y la de quienes sustentan que nuestro país cuenta con la necesaria capacidad de ahorro interno para afrontarlo en forma autónoma y al margen de los organismos financieros internacionales, controlados por los capitales extranjeros.

No existe en la historia de los países del mundo liberación financiada por los organismos internacionales.

Todo país que se ha liberado del imperialismo o del colonialismo lo ha hecho en base a la capacidad productiva de su pueblo y a la adopción de medidas económicas que han impedido el empleo irracional de los recursos existentes y el drenaje continuo de riquezas y de divisas que realizan los capitales extranjeros y las capas ociosas de la comunidad.

Las empresas extranjeras sacan del país el producto del trabajo de los argentinos mediante dos formas: a) "Legales": remisión de las utilidades al extranjero, pago de patentes, regalías, marcas y demás formas encubiertas dentro de la ley para remitir fondos al exterior; b) "Ilegales": subfacturación (poner en las facturas un precio inferior al que se cobra) en la exportación de productos y sobrefacturación (poner en las facturas un precio superior al que se paga) en la importación de productos, falsa amortización de capitales y demás maneras posibilitadas por la inexistencia de un monopolio estatal del comercio exterior y la ausencia de un eficaz control de cambio.

Por su parte la oligarquía terrateniente sustrae a la economía nacional cuantiosas sumas de dinero que van a depositar en bancos extranjeros. La nacionalización de los monopolios extranjeros y la expropiación de la oligarquía terrateniente articulado con el monopolio estatal del comercio exterior y un eficaz control de cambio, posibilitará la supresión del drenaje de fondos hacia el extranjero, determinando la existencia de un ahorro nacional con posibilidades de financiar plenamente el desarrollo independiente del país.

5. Promover la investigación científica y el desarrollo tecnológico:

Una de las características fundamentales introducida por la dependencia en nuestra economía, es la promoción entre los habitantes del país de bienes de consumo durables, muchas veces de precios injustificados y que son introducidos a través de una propaganda manejada por los intereses monopólicos. Esta irracional sociedad de consumo que nos impone la dependencia, permite a los capitales extranjeros alzarse con millones de dólares que en concepto de patentes deja el pueblo argentino en gaseosas, cigarrillos, artículos del hogar, prendas de vestir, diseños, etc.

Esta es la tecnología por la cual pagan los argentinos millones de dólares y que constituye una erogación que incrementa la dependencia de nuestra economía. Todo proceso que tiende a generar una economía independiente necesita del aporte tecnológico, que es precisamente el que niega el capital extranjero a los países dependientes.

El pueblo argentino debe desarrollar una economía independiente. Para ello es fundamental el conocimiento pleno de su realidad, ya que si se desarrolla una tecnología basada en elementos que no tiene nuestro país y que debemos importar, desarrollaremos la dependencia en vez de la independencia.

En segundo lugar se puede importar una tecnología siempre que esté vinculada a la satisfacción de las necesidades reales de las mayorías nacionales.

En la realidad dependiente, la investigación científica ha sido manejada de conformidad con los intereses de los capitales extranjeros y al margen de la realidad de nuestro país y de las necesidades de su pueblo.

El Estado, de conformidad a las reales necesidades y posibilidades nacionales fomenta, coordina, controla y dirige la investigación científica y el desarrollo tecnológico a través de las Universidades Nacionales.

LA INDEPENDENCIA ECONÓMICA SERA POSIBLE A TRAVÉS DE LA REALIZACIÓN DE LAS SIGUIENTES MEDIDAS:

A) NACIONALIZACIÓN DE LOS SECTORES CLAVES DE LA ECONOMÍA:

Es preciso incorporar al área social de la economía la propiedad y el control de los resortes claves de nuestra economía. Los monopolios y la oligarquía que hoy controlan estos sectores claves acusan al Estado de ser un mal administrador. El Estado en sí no es ni buen ni mal administrador, su eficacia depende de la activa participación de todos los argentinos para lograr una correcta administración de los bienes nacionalizados. Los monopolios y la oligarquía dueños de los sectores más importantes de la actividad económica del país, tienen buena administración para robar al máximo el producto del trabajo de los argentinos, regular la producción industrial en su beneficio, controlar la explotación, y comercialización de las riquezas básicas y condicionar de esa manera el desarrollo económico y social. Por ello los defectos de las actuales empresas estatales se superarán con la creciente y activa participación popular y no con el traspaso de las mismas a los monopolios extranjeros.

a) Nacionalización de la siderurgia básica: Expropiar los monopolios extranjeros que se encuentran en la producción de arrabio y acero y en la manufacturación del laminado. Integrar todas las etapas de la industria siderúrgica. Estas medidas impedirán que SUMISA ceda parte de su utilidad a las empresas extranjeras que hoy le compran materia prima para realizar el laminado, etapa del proceso que es la que produce la mayor utilidad. Restituir a SOMISA el carácter exclusivo de empresa estatal suprimiendo su forma actual de empresa mixta. Explotación de los yacimientos de mineral de hierro existentes con reservas calculadas por empresas nacionales, otorgando prioridad a la explotación de Sierra Grande, desarrollo de Fabricaciones Militares en sus actuales actividades, teniendo como objetivo el autoabastecimiento en materia de armamentos.

b) Nacionalización de la industria petroquímica: La petroquímica, que comprende los productos derivados del petróleo y del gas natural constituye una de las ramas más importante de la economía contemporánea, ya que sus productos químicos intermedios y finales constituyen la materia prima de centenares de empresas de diversos tipos de producción. En consecuencia es necesario proceder a la nacionalización total de la industria petroquímica, hoy en manos de los monopolios extranjeros (Duperial, Ipako, PASA, Atanor, etc.) y la derogación de toda legislación vigente que posibilite su explotación por empresas extranjeras. Nacionalización de la química pesada.

c) Nacionalización de la industria automotriz terminal: La industria automotriz terminal que arma el automotor y lo coloca en el mercado, debe ser nacionalizada. Esta medida permitirá reorientar la producción hacia un menor número de modelos —lo que reducirá su costo— hacia vehículos necesarios para transporte colectivo y para cada actividad productiva.

d) Nacionalización de los recursos y de la infraestructura energética: Concreción de una gran empresa eléctrica única del Estado nacional, transfiriendo a A y E las usinas termoeléctricas de magnitud y la explotación de los complejos hidroeléctricos y centrales termonucleares existentes en el territorio nacional. Esta empresa otorgará prioridad para la creación de nuevas fuentes de energía a las usinas hidroeléctricas.

Participarán todas las provincias de su dirección. De esta manera, A y E tendrá a su cargo la planificación de la producción y la distribución de la energía eléctrica en todo el país. Anulación de los contratos energéticos lesivos al interés nacional.

e) Monopolio estatal del petróleo, gas y carbón: Monopolio estatal de la exploración, explotación, industrialización y comercialización del petróleo, del gas y del carbón a través de YPP, Gas del Estado y YCP. Reestructuración de estas empresas tendientes a lograr su máxima eficiencia e incorporación a las mismas de representantes de las provincias. Anulación de todos los contratos de concesión lesivos al interés nacional.

f) Defensa del subsuelo minero: El subsuelo minero constituye patrimonio inalienable de la Nación; La realidad demanda la necesidad de profundizar el estudio geológico de nuestro territorio (el estudio de su formación, su naturaleza y los cambios que ha experimentado) y apoyar una empresa estatal de Minas que encare la explotación, producción y comercialización de hierro, cobre, plomo, cinc, plata, estaño, bauxita, tungsteno, berilio y uranio. Cancelación de todo derecho de explotación que haya sido otorgado a compañías extranjeras sobre yacimientos mineros de carácter estratégico y su explotación a cargo del Estado, Apoyo a la pequeña y mediana empresa minera en la explotación de minerales no estratégicos.

g) Nacionalización de los medios de transporte: Desarrollo eficiente de los Ferrocarriles Argentinos y de las flotas marítima, fluvial y aérea. Realizar la mayor parte del transporte de carga interna de larga distancia por vías férreas y fluviales. Reordenar las vías férreas y los caminos estableciendo lazos de comunicación entre las provincias, rompiendo de esta forma con la deformación impuesta por el imperialismo y la oligarquía, de hacer concluir las vías de comunicación en el puerto de Buenos Aires.

Trasladar el mayor porcentaje de exportaciones posibles en nuestras bodegas marítimas, incluyendo en los convenios internacionales la cláusula de transporte para asegurar tal objetivo. Fortalecimiento y desarrollo de ELMA (Empresa Líneas Marítimas Argentinas) y Taller de Reparación Naval (TA-RE-NA). Exclusividad en el cabotaje nacional aéreo y marítimo para empresas argentinas. Supresión de subsidios a toda empresa privada de transporte. Fijación de fletes y pasajes tendientes a favorecer el desarrollo del interior. Desarrollo de la industria naval (astilleros), ferroviaria y aérea.

h) Nacionalización del sistema financiero y de seguros: Todas las operaciones con divisas serán manejadas por el Estado por medio de un control de cambio que evite la fuga de capitales y su empleo en la adquisición de bienes de lujo prescindibles para el país. Moratoria de la deuda externa que permita al país el cumplimiento de sus obligaciones en los plazos que le resulten conveniente. Nacionalización del sistema bancario a los efectos de que el crédito esté al servicio de las necesidades de las mayorías nacionales, posibilite un sano desarrollo de la pequeña y mediana empresa del campo y de la ciudad y permita a toda mujer y hombre que trabaje afrontar emergencias de su vida cotidiana (compra o reforma de vivienda, nacimientos, enfermedades, fallecimientos, etc.). Es necesario jerarquizar en los créditos a largo plazo las operaciones que tengan por objeto la adquisición de bienes que incrementen la capacidad productiva de las pequeñas y medianas empresas de la ciudad y del campo. Supresión de créditos a las empresas extranjeras para evitar que el ahorro nacional sea puesto al servicio de los monopolios. Clausura de todos los organismos financieros no bancarios ni cooperativos privados. Nacionalización de las actividades del seguro y reaseguro.

i) Nacionalización de los medios de comunicación:

Los medios de comunicación requieren por parte del Estado un interés especial ya que contribuyen a estrechar los vínculos de los hombres entre sí y con toda la sociedad. Es necesario fortalecer y dotar de los medios necesarios para una correcta prestación de servicios a ENTEL (Empresa Nacional de Telecomunicaciones) u ENCOTEL (Empresa Nacional de Correos y Telégrafos). Pasar a manos de ENTEL la compañía Entrerriana de Teléfonos (Entre Ríos) y la compañía Argentina de Teléfonos que presta servicios en las provincias de Mendoza, San Juan, Tucumán, Salta y Santiago del Estero.

j) Nacionalización del comercio exterior: Debe decretarse el monopolio absoluto del Estado en materia de comercio exterior, a los efectos de que toda exportación e importación se haga de acuerdo a los intereses de la Nación y no en interés exclusivo de reducidos grupos vinculados a los monopolios extranjeros que se esconden detrás de la máscara de la libertad de comercio. Frente al enorme poder que concentran en sus manos estos monopolios comercializadores el productor argentino sólo puede triunfar oponiéndoles el poder representado por una acción estatal que concentre en sus manos,todas las actividades vinculadas al comercio exterior. El problema no está planteado entre "libertad de comercio" o "monopolio estatal" sino entre monopolio al servicio de los intereses extranjeros o monopolio al servicio del pueblo argentino. Para concretar este propósito es necesario;

1) Un organismo estatal que enfrente como único comprador y vendedor a los trust internacionales y que desarrollen los propios organismos de distribución en el mercado internacional.

2) Una política comercial basada RH el comercio con todos los países del mundo, pero estrechando fundamentalmente los vínculos comerciales con los países latinoamericanos y del tercer mundo a partir de convenios bilaterales que contemplen el interés de las partes. Rechazo de las normas derivadas de integraciones regionales del tipo ALALC (Asociación Latinoamericana de Libre Comercio), que sean lesivas al país.

3) Un banco de importación y exportación.

4) Flota marítima y fluvial en manos del Estado (en especial organización de la flota de barcos frigoríficos).

5) Organismo estatal que monopolice la comercialización de las cosechas y de las carnes:

6) Nacionalización de los elevadores de granos y ampliación de la capacidad existente. Todas estas actividades serán realizadas por organismos en los que tendrán participación electiva los trabajadores y los productores. Es necesario restringir drásticamente toda importación no imprescindible para la producción nacional.

Es preciso desarrollar las exportaciones no tradicionales creando una línea de créditos que beneficie a las mismas.

k) Comercio Interior: Creación de un organismo de comercio interior que posibilite al Estado fiscalizar y realizar en determinados rubros la tarea de distribución de mercaderías y su comercialización a nivel mayorista. A través de nuestra historia hemos visto que cada vez que los gobiernos de origen popular han intentado aplicar medidas como las de precios máximos se ha producido en el país si desabastecimiento, el acaparamiento y el mercado negro. Ello se debe a que el Estado no tiene en sus manos los mecanismos necesarios para regularizar el abastecimiento interno y fiscalizar la distribución de los productos en el país.

l) Nacionalización de la Industria alimenticia que está en manos extranjeras.

B) POLÍTICA AGROPECUARIA

a) Reforma agraria: Realización de la reforma agraria consistente en la expropiación del latifundio. Procurar mayor producción, mejor calidad, bajos costos, bajos precios y mejoramiento de las condiciones de vida de las poblaciones rurales e incremento de las mismas,

La modificación sustancial del actual régimen de tenencia de la tierra traerá la tecnificación y la mecanización corno consecuencia.

Por modificación del régimen de tenencia de la tierra debe entenderse la desaparición de la clase de los grandes terratenientes y de los grandes invernadores, así corno del régimen de arriendo actual.

Brindar al trabajador rural las mismas condiciones de bienestar y de posibilidades culturales que las existentes en las ciudades.

Determinación de precios uniformes para cereales y carnes contemplando los costos según las zonas de producción. El criterio de determinar precios únicos para cereales y carnes es erróneo. La productividad de la zona y por lo tanto los costos de producción por unidad son distintos y se favorece así a los productores de tierras más fértiles en detrimento de los demás, que constituyen la mayoría. Por ejemplo: La zona, trigüera de la provincia de Buenos Aires rinde alrededor de 3.000 kg. por ha. en cambio en Entre Ríos el rinde es aproximadamente la mitad; si tuviéramos un precio único no se alentaría la producción en las zonas de menores rindes. Por eso el precio debe ser uniforme según las zonas; así en nuestro ejemplo los productores de Buenos Aires tendrían un precio y los de Entre Ríos el doble para compensar la mitad del rinde. Este criterio debe ser completado con un control de la producción según las áreas para evitar que se utilicen zonas marginales para cultivos con el consiguiente encarecimiento de los costos.

b) Nacionalización de la industria de maquinarias agrícolas, de abono, productos químicos y far-macéuticos para el campo, semillas, etc., que se hallan en manos de los monopolios extranjeros.

c) Comercialización de nuestras exportaciones agropecuarias a través de organismos estatales en los que tendrán participación activa los trabajadores y los productores. El Estado promoverá la instalación o traslado de actividades agroindustriales cuyos procesos utilicen materias primas zonales.

d) Los arrendatarios medieros y aparceros recibirán las tierras que trabajan siempre que constituyan una unidad económica y residan en ellas.

e) Los pequeños y medianos propietarios que trabajan sus tierras no podrán ser desalojados de ellas bajo ningún pretexto.

f) Una ley determinará cuál es en cada zona la superficie inexpropiable sujeta a propiedad privada, cualquier infracción a dicha ley será severamente sancionada.

g) Las instituciones oficiales de crédito como el Banco de la Nación Argentina y las que especialmente se crearán por ley, desarrollarán una política de amparo crediticio en favor de la estabilidad a quienes proveerá de la ayuda técnica necesaria para, racionalizar y tecnificar la producción. Estimular el desarrollo del INTA, otorgándole además participación en las etapas de comercialización y asesorarniento obligatorio de las cooperativas de producción y en la explotación, de la tierra afectada a la reforma agraria, asegurando al trabajador y al productor participación en la dirección de esta institución.

h) El Estado fomentará la creación de Centros de población agrícola a cuyos residentes garantizará un adecuado nivel de vida (vivienda, salud, educación y esparcimiento), tierra y agua para fomentar la agricultura y evitar la destrucción de los elementos naturales.

C) PRESERVACIÓN DE LAS RIQUEZAS Y PROMOCIÓN. DE LA INDUSTRIA PESQUERA

Concreción definitiva del estudio que determine las posibilidades económicas de la explotación de la riqueza pesquera de nuestro extenso litoral marítimo, de los mares australes y de nuestros ríos. Creación de una Junta Nacional de Pesca, que centralice, promueva y administre la actividad pesquera del país, jerarquizando la comercialización a través de la creación de una red de frigoríficos que facilite la distribución en el interior del país. Creación de una flota estatal de barcos pesqueros de altura. Promoción de cooperativas integrales de pescadores. Nacionalizar el comercio exterior de la pesca, celebrando convenios con todos los países del mundo, para romper con la dependencia en el comercio internacional.

Desarrollo de los recursos ictícolas en los lagos, represas y cursos de agua del territorio nacional y la instalación de una industria frigorífica afín en las zonas de los grandes lagos patagónicos.

D) DEFENSA DE LA RIQUEZA FORESTAL

Recuperar las riquezas forestales a los fines de la explotación racional de nuestros bosques, procediendo a, su inmediata reforestación y a la creación de nuevas plantaciones en zonas aptas no aprovechadas hasta el momento. Instalación de plantas de celulosa que cubran las necesidades de papel, particularmente en lo que hace al papel de prensa, radicadas en el lugar donde exista la materia prima. Nacionalización de las plantas de celulosa ya existentes.

E) POLÍTICA PRESUPUESTARIA

Resulta imprescindible llevar a cabo un sistema de impuestos que tenga en cuenta la real capacidad económica de los ciudadanos y que favorezca la inversión y la contratación de la mano de obra. Este criterio impositivo debe constituir la base fundamental de los recursos del Estado nacional conjuntamente con los impuestos de exportación e importación y las retenciones que se efectúen en materia de comercio exterior.

Debe desarrollarse una política tendiente a eliminar los impuestos indirectos (aquellos que al recaer sobre los artículos de primera necesidad, elevan su precio) con excepción de aquellos que gravan artículos suntuarios y bebidas de alta graduación alcohólica.

En lo que hace a los gastos públicos, tendrán prioridad los destinados a satisfacer las necesidades de las mayorías nacionales en vivienda, educación y salud pública y a promover las industrias básicas del área social.

F) POLÍTICA OCUPACIÓNAL

El Estado garantizará la plena ocupación de todos los argentinos en edad de trabajar, con un digno nivel de remuneraciones. La política de ingresos reales tenderá a aumentar la participación de los trabajadores en la renta nacional. Asegurará jornales y sueldos dignos a los trabajadores, empleados, profesionales, docentes y demás integrantes de la clase media que trabaja en relación de dependencia.

G) CONTROL DE PRECIOS Y COSTOS

Se realizará un estricto control de precios partiendo de las empresas líderes y se intervendrán las administraciones de las firmas más importantes del país a los efectos de determinar la realidad en materia de costos. Estas medidas serán posibles reglamentando la participación de los organismos sindicales en la administración de las grandes empresas de conformidad con lo establecido por el art. 14 bis de la Constitución Nacional. Se reglamentarán precios fijos para los artículos que integran la canasta familiar, los medicamentos y la vestimenta.

II. EN LO LABORAL

Asegurar una legislación que posibilite mejorar las condiciones de vida y trabajo garantizando la vivienda, salud, educación, el descanso semanal y recreación de los trabajadores, y un régimen de remuneraciones que acreciente la participación de los trabajadores en la renta nacional.

El Partido entiende que el trabajo productivo es el medio indispensable para satisfacer las necesidades materiales y espirituales de la comunidad y sus integrantes, el fundamento de la prosperidad general y la causa de todas las conquistas de la civilización y que constituye asimismo el único medio de perfección del hombre.

Por ello sostiene que todo individuo tiene el deber social de trabajar y el derecho de ser protegido por el Estado en el trabajo.

Por todo esto el Partido propone:

1) Se evitará, con leyes adecuadas y con organismos que así lo garanticen, toda discriminación en cualquiera de las relaciones que genera el trabajo por razón de credo político o religioso, raza, nacionalidad, sexo, edad.

2) El Estado garantizará al trabajador el derecho a una retribución justa y el goce de condiciones dignas de trabajo mediante leyes que aseguren:

a) Un salario mínimo, vital y móvil, que permita al trabajador —con una sola actividad— lograr el bienestar personal y de su familia mediante el acceso a la vivienda, salud, alimentación y vestimenta adecuada, educación y cultura, descanso y esparcimiento, de sus integrantes. El salario mínimo será actualizado periódicamente de acuerdo a las variaciones reales del costo de la vida y estará exento de embargo, compensación y descuento. Salarios iguales para ambos sexos.

b) Se establecerá la jornada máxima de trabajo en 8 horas* En caso de trabajo insalubre, peligroso o nocturno la jornada máxima será de 6 horas. Entre el cese de una jornada y el comienzo de la siguiente debe mediar una pausa no inferior a las 14 horas.

c) Limitación de las horas extras a los casos indispensables.

El Estado garantizará a los trabajadores el derecho a asociarse para la defensa de sus intereses profesionales, en entidades únicas organizadas democráticamente por gremios. Dichas asociaciones detentarán la representación gremial, conforme a la reglamentación que se dicte asegurando el funcionamiento autónomo de las mismas, así como el libre desempeño de sus autoridades y representantes mediante un adecuado régimen de estabilidad en el empleo e inmunidades personales.

d) Las mujeres tienen derecho a una reglamentación especial de las condiciones de trabajo por motivos de embarazo, maternidad y cuidado de los hijos.

e) Establecer que a igual trabajo, igual categoría, igual remuneración.

f) Descanso semanal y vacaciones remuneradas (calculadas sobre la totalidad de los años trabajados y no sobre el tiempo de permanencia en la empresa que las otorga). Las mismas deberán ser computadas sobre días hábiles.

g) Condiciones de higiene y seguridad acorde con los adelantos técnicos y científicos de la materia.

h) Asistencia médica integral y gratuita para el trabajador y su familia.

i) Protección en caso de despido mediante leyes que tiendan a estabilizar al trabajador en el empleo. Eliminación del "trabajo a destajo y del método de incentivos. El Estado, mediante los instrumentos legales que sean necesarios, asegura el derecho de todos los habitantes a percibir subsidios y las restantes prestaciones que cubran las contingencias temporarias o permanentes, derivadas de la falta total o parcial de trabajo, enfermedades o vejez, y las familiares de origen congénito, patológico, accidental o económico social.

j) Promover la elevación cultural, el cuidado de la formación educacional y la aptitud profesional de los trabajadores en establecimientos adecuados y gratuitos de manera que permita su orientación hacia todas las ramas del conocimiento.

k) Se garantizará el derecho de huelga, libre discusión y actualización de los convenios colectivos de trabajo en las comisiones paritarias.

III. SALUD, EDUCACIÓN Y VIVIENDA PARA TODOS

El progreso de un país está vinculado básica y esencialmente a la calidad y cantidad de los integrantes de su pueblo. El hombre constituye el factor esencial de todo proceso económico, social y político. El hombre determina esos procesos y los pone a su servicio. El hombre tiene la posibilidad de modificar el medio que lo rodea y aún su propia realidad. La capacidad potencial creadora y realizadora de los pueblos liberados es ilimitada.

Por todo lo expuesto, consideramos a la salud pública y a la educación, por incidir directamente en el condicionamiento y en la superación material y cultural del pueblo, los cimientos básicos de todo proceso serio y sano del desarrollo nacional autónomo.

La causa de la Liberación Nacional encierra, entre sus grandes batallas, las de la salud pública y de la educación.

1) SALUD PUBLICA:

Entendemos por salud pública la preservación, incremento y premoción de la salud de todos los integrantes del pueblo.

Sobre la base de los servicios sanitarios existentes el Estado garantizará la asistencia médica integral, igualitaria, gratuita y obligatoria para todos los integrantes de la Nación coordinando al efecto los servicios oficiales, sindicales y mutuales. Los servicios privados se integrarán voluntariamente al plan y el hospital constituirá el eje fundamental y funcional del sistema así establecido.

Este plan nacional de salud comprende: La asistencia médica de todos los habitantes de la ciudad y del campo bajo las cuatro formas de: promoción, protección, recuperación y rehabilitación, otorgando prioridad a la medicina preventiva sobre la curativa. El plan nacional de salud promoverá la participación popular en todos sus niveles y etapas y estará regido por un organismo nacional en el cual participarán el Estado, el pueblo a través de sus organismos gremiales, los trabajadores de la salud y la Universidad.

El plan nacional de salud incluye el desarrollo de un programa nacional permanente de educación sanitaria en centros de trabajo, de estudios, clubes, cooperativas y vecinales.

Se garantizará la asistencia materno-infantil desde antes de la concepción, asegurando que la futura madre sea una mujer física y síquicamente apta para el desarrollo de un nuevo ser. La madre y su hijo hasta los dos años de edad tendrán derecho a alimentación gratuita, adecuada y suficiente.

Se brindará a la infancia y a la juventud una asistencia especial, que garantice su correcto desarrollo físico y síquico.

Se dará importancia prioritaria a la educación física, a la práctica del deporte y a la recreación como elementos indispensables al desarrollo de la salud física y mental del pueblo.

Fijación de precios fijos y uniformes a los medicamentos. Depuración y reestructuración científica de la farmacopea nacional argentina. Control público de la industria farmacéutica, a los efectos de garantizar seguridad y accesibilidad al medicamento. Los laboratorios extranjeros serán nacionalizados e integrados en una empresa estatal.

2) EDUCACIÓN

Se planificará el desarrollo permanente de la campaña de alfabetización. Todos los niveles educativos se estructurarán en forma tal de posibilitar la incorporación a los mismos a quienes trabajan y estudian.

El Estado garantizará la educación gratuita, común y obligatoria en los ciclos primarios y secundarios y será respetuoso de la libertad de conciencia. Se evitará la deserción escolar y se crearán condiciones que posibiliten el aprovechamiento de la enseñanza a través de becas, subsidios, la distribución de ropas y útiles escolares gratuitos, la habilitación de comedores y viviendas y de otros servicios de asistencia educacional, para los estudiantes de bajos recursos económicos.

El Estado nacional brindará enseñanza universitaria a través de las Universidades Nacionales. Las mismas tendrán ingreso libre y su enseñanza será gratuita. Las Universidades Nacionales serán autónomas y su gobierno a todos los niveles estará integrado por docentes, graduados, estudiantes y no-docentes. En ellas se jerarquizará el desarrollo de las carreras de mayor vinculación con las necesidades del pueblo y el desarrollo del país. Los títulos de habilitación profesional serán otorgados o controlados por el Estado.

La enseñanza en todos los niveles estará a cargo del Estado nacional, en combinación con las provincias y municipios.

La educación física y la práctica de deportes serán obligatorias en todos los niveles de la enseñanza.

En la adquisición de los conocimientos se jerarquizará la práctica por sobre la teoría. La enseñanza estará orientada de modo de superar la distinción entre el trabajo manual e intelectual, para ello se combina la enseñanza con el trabajo productivo.

Se promoverá la enseñanza para adultos.

Garantizará una remuneración adecuada a los docentes de todos los ciclos y se organizará sistemáticamente la actualización y perfeccionamiento docente y cursos de post-grado universitario.

Se destinarán espacios a través de los medios de comunicación de masas, destinados a programas educativos planificados por los respectivos organismos.

3) VIVIENDA

Materialización al derecho de una vivienda digna. Se llevará a cabo un plan de construcción de viviendas al alcance de la familia trabajadora mediante planes que financiará y conducirá el Estado, quien además promoverá la formación de sociedades cooperativas de trabajo, cuyas acciones serán garantizadas y controladas por el mismo. Tendrán prioridad los habitantes de villas de emergencia y viviendas precarias del medio rural. Suspensión de los desalojos urbanos y rurales. El Estado implantará una ley de alquileres que tienda a solucionar las necesidades habitacionales de las mayorías nacionales.

4) CULTURA

Fomento de las actividades artísticas y culturales. Divulgación a nivel popular de las expresiones auténticas del quehacer cultural: literatura, plástica, teatro y música. Ampliar el apoyo estatal al Fondo Nacional de las Artes y al Instituto Nacional de Cinematografía, a los que deberá darse base popular. Otorgamiento de becas para el incentivo de la aptitud creativa individual y colectiva. Propiciar el intercambio cultural con todos los países del mundo, sin discriminación ideológica.

Se realizará una política tendiente a garantizar y jerarquizar el libro nacional.

5) DE LA FAMILIA

El Estado acuerda especial protección a la familia, en especial a la familia numerosa. Se garantizará la igualdad jurídica de los cónyuges y un especial cuidado a la atención y a la asistencia de la madre y el niño. Reestablecimiento de la disposición legal que posibilita el divorcio.

Auspiciar a nivel de gobierno nacional, provincial y municipal la creación de guarderías científicamente planificadas para atender los requerimientos del niño en todos sus aspectos. Propiciar la creación de guarderías en cada lugar de trabajo en donde exista un mínimo de 20 mujeres madres.

6) DEL MENOR

El Estado reconoce que la juventud y los niños constituyen el futuro del país. Por ello brindará la atención integral del menor garantizando el derecho a su educación. La protección desde su concepción hasta su nacimiento y desde su nacimiento hasta su pleno desarrollo significa defender y acrecentar un capital humano-indispensable para el crecimiento del pueblo. Los menores son amparados y juzgados por leyes especiales. Los institutos de rehabilitación garantizarán la salud física y síquica de los internados, su educación y futura incorporación a la sociedad a través del trabajo productivo.

El Estado garantizará la asistencia médica integral, obligatoria y gratuita de los menores.

Se tomarán medidas para impedir la explotación y el abuso de los menores.

Se habilitarán colonias de vacaciones dotadas de los adelantos técnicos, científicos de la época que aseguran el esparcimiento y el descanso necesario para el desarrollo de los niños.

Se crearán jardines de infantes en todo el territorio de la Nación.

7) DE LA JUVENTUD

El Estado garantiza la formación integral de los jóvenes mediante la enseñanza, el trabajo productivo, la gimnasia, asistencia médica y el sano esparcimiento, asegurándoles así su salud física y mental. En este sentido se implementará la participación de la juventud en trabajos voluntarios, en tareas vinculadas al incremento del bienestar de las mayorías nacionales. Se otorgará a la juventud una plena participación en la planificación y ejecución del quehacer nacional a todo nivel.

8) DE LA ANCIANIDAD

El Estado reconoce en la ancianidad un sector social que en virtud de sus aportes pasados y sus potencialidades creadoras presentes merece el respeto y consideración de sus semejantes. Por ello se garantizará a los ancianos el derecho a la protección y a la asistencia integral a cargo de su familia y en caso de desamparo corresponderá al Estado asegurar dicha asistencia en forma gratuita y en instituciones adecuadas

Cuando las condiciones del anciano lo permitan el Estado garantizará su inserción en el proceso productivo nacional y en la actividad creadora. Se asegurará asistencia médica integral, gratuita y obligatoria y los medíos necesarios para la recreación y el esparcimiento de los ancianos.

9) DE LAS COMUNIDADES INDÍGENAS

En nuestro país viven marginados más de 250.000 argentinos de habla y costumbres indígenas. Las condiciones de salud y vivienda de los mismos son pésimas; la educación salvo pequeñas excepciones es nula; se alimentan de peces puesto que generalmente habitan las orillas de los grandes ríos (Pilcomayo, Bermejo, etc.), de frutos, legumbres naturales y de sus pequeños cultivos. Ante esta realidad entendemos que el Estado deberá ceder tierras y financiar la construcción de colonias indígenas donde se instalarán escuelas primarias y talleres de aprendizaje. Las comunidades contarán con maquinarias y demás implementos agrícolas para trabajar la tierra. Sus habitantes tendrán acceso a la salud.

Con estas medidas se integrará a estos hombres y mujeres a la sociedad donde podrán desempeñarse en los trabajos aprendidos y continuar sus estudios en los establecimientos del país, luego de las primeras letras aprendidas en las colonias.

10) SEGURIDAD SOCIAL

Reestructuración del actual sistema previsional tendiendo a asegurar una jubilación inmediata, cierta y de un nivel acorde con el costo de vida. Garantizar la amplia participación de los trabajadores activos y pasivos en la conducción y funcionamiento de los organismos previsionales y el estricto cumplimiento de los aportes por parte del Estado y de los particulares. Incorporación a los beneficios de la seguridad social de los impedidos de ganarse su propio sustento por accidente. Igualdad de niveles en límites de edad, con las excepciones correspondientes a los trabajos considerados insalubres. Extensión de coberturas al sector pasivo mediante una política integral que incluya planes de turismo, recreación y esparcimiento.

11) TURISMO

Estructuración del turismo social interno, jerarquizando la recreación, descanso y recuperación de la familia de los trabajadores. Utilización de los parques y reservas nacionales con idéntico criterio. Realización de la infraestructura necesaria para incremento sostenido del turismo nacional. Nacionalización de la hotelería de tránsito internacional. Explotación de la hotelería estatal, eliminación de las concesiones privadas. Centralización estatal del tránsito internacional de pasajeros. El Estado propiciará la formación de cadenas de hoteles.

12) MEDIOS DE COMUNICACIÓN DE MASAS

Los medios de comunicación de masas pertenecerán al dominio público del Estado y estarán prioritariamente al servicio de la educación integral del pueblo, del desarrollo de la cultura nacional y del sano esparcimiento. Se reducirá y ordenará en los mismos los espacios publicitarios.

IV. VIGENCIA PLENA DE LA SOBERANÍA POPULAR

Para que los puntos de este programa se concreten es indispensable:

1) El ejercicio pleno de las libertades políticas, derechos y garantías constitucionales para todos.

2) Que la conducción política esté en manos de quienes legítimamente representen al pueblo.

Por ello, propugnamos:

a) Vigencia plena de los derechos y garantías constitucionales: de palabra, de prensa, de reunión, de asociación, de creencias; derecho a la existencia y creación de organizaciones y partidos políticos; derecho a aprender y a enseñar; igualdad de derechos entre hombres y mujeres. Derogación de la legislación represiva, aplicación de las leyes que sancionan los apremios ilegales de toda índole.

b) Libertad de elegir y ser elegido, sin ningún tipo de excepciones. El Partido luchará por una acción política que supere las falsas divisiones del pueblo argentino, constantemente instrumentadas por sus enemigos fundamentales: el imperialismo y la oligarquía. Debe establecerse la obligatoriedad de que los integrantes de todo cuerpo colegiado de origen popular, a nivel municipal, provincial y nacional, efectúen periódicos informes a sus electores acerca de su actividad pública. Debe garantizarse a los electores la posibilidad de revocación del mandato.

c) Participación efectiva del pueblo argentino en la conducción económica, política, social y cultural, a través de organismos donde se expresen democráticamente los sectores populares.

En particular, es esencial que los trabajadores puedan ejercer en plenitud el derecho a organizar sindicalmente, el derecho a participar en las empresas, en la gestión y en el control de la producción, en la distribución y en la planificación de la economía y, principalmente, el derecho a actuar políticamente.

d) Luchar por el afianzamiento y fortalecimiento de la Confederación General del Trabajo como organización única de los trabajadores.

e) Vigencia de la independencia institucional del Poder Judicial. Los jueces de las cámaras y tribunales inferiores serán elegidos directamente por el pueblo y deberán rendir cuenta de su gestión, sus mandatos podrán ser revocados por el pueblo.

í) Autonomía provincial: para que exista un real desarrollo del interior se garantizará la autonomía provincial, vigorizándola con la activa participación de las provincias en la planificación y realización de las obras nacionales de trascendencia. Se reestructurará asimismo el régimen municipal a fin de posibilitar la participación activa y constante, a todo nivel, de la población de ]os municipios.

V. EN LO NACIONAL SUPERACIÓN DE LAS DIFERENCIAS EXISTENTES ENTRE LA CAPITAL Y EL INTERIOR Y ENTRE LA CIUDAD Y EL CAMPO

Nuestra Nación ha crecido y se ha desarrollado no en función de los intereses nacionales, sino de acuerdo a los intereses de los monopolios extranjeros. La estructuración de una Argentina dependiente, a determinado profundas diferencias entre el desarrollo de la capital y el interior del país y entre la ciudad y el campo, que se manifiestan claramente en las profundas diferencias de posibilidades y de régimen de vida de los argentinos que en ellas habitan.

Encarar soluciones que corrijan la deformada distribución de la población argentina, que reinvindiquen las postergadas aspiraciones de los hombres y mujeres de trabajo del interior y del campo, constituye un objetivo del Partido, cuya concreción permitirá incorporar la población del interior y del campo a la defensa de la soberanía nacional y a la lucha por la liberación de Argentina.

Se hace necesario entonces formular un conjunto de medidas, que contemplando aspectos económicos, sociales, políticos y educacionales y, la distribución geográfica de la población, tengan como meta lograr un desarrollo armónico de las distintas regiones del país.

Entre ellas deben jerarquizarse:

1) Desarrollo de fuentes de trabajo, que tengan por base fundamental la industrialización de los productos regionales.

2) Desarrollo de vías de comunicación que conecten entre sí las distintas regiones del interior.

3) Construcción de hospitales, dispensarios, desarrollo de campaña para erradicar las enfermedades endémicas existentes en diversas zonas del país. Organización de equipos móviles de sanidad.

4) Provisión de agua potable, luz, servicios sanitarios y viviendas adecuadas para una vida digna y plena de felicidad.

5) Construcción de escuelas y colegios en las distintas poblaciones, con viviendas para los estudiantes que residen en zonas alejadas.

6) Construcción de centros deportivos y de recreación y turismo, organización de bibliotecas en las ciudades del interior.

7) Organización de actos culturales y deportivos de importancia en el interior.

8) Verificación estricta del cumplimiento de las condiciones de trabajo establecidas por las leyes y del funcionamiento de los organismos de obra social existentes, en las ciudades y pueblos del interior y en el campo.

VI. SOBERANÍA Y AUTODETERMINACIÓN NACIÓNAL. UNIDAD CON LOS PUEBLOS DEL TERCER MUNDO

Política internacional independiente de cualquier tutela, solidaria con todos los pueblos latinoamericanos y de apoyo a los que luchan por su liberación.

Estrechar vínculos comerciales con los países latinoamericanos y del TERCER MUNDO, a través de convenios bilaterales que contemplen el interés de las partes y que pongan definitivamente al desarrollo económico argentino fuera de las manos de la dependencia y en relación directa con el desarrollo de los pueblos de América Latina, Asia y África.

Promover la creación de un organismo internacional latinoamericano, capaz de actuar al margen de las presiones del imperialismo norteamericano.

Afianzamiento del derecho del Estado Argentino sobre la plataforma marítima hasta las 200 millas. Afianzamiento de nuestra soberanía en la Antártida e Islas del Atlántico Sur.

Política internacional basada en las tradiciones de la República que reconoce como eje la igualdad jurídica de las naciones, el derecho a la autodeterminación de los pueblos y la no intervención.

Sobre estas bases estrechar relaciones con todos los países del mundo en defensa de la paz mundial, de la disminución de los gastos en armamentos y del desarme.

Rescate definitivo para nuestra patria de las Islas Malvinas.

 

"Ante el futuro de corrupción, ante el futuro de drogas, ante el futuro de guerras y de racismo que promete la estúpida sociedad de consumo que se nos impone, el Partido Socialista Popular levanta una futura patria socialista donde el hombre sea el señor de la tierra y dei espacio, donde se reconozca como máxima riqueza de la Nación a su pueblo y consecuentemente, la salud pública y la educación sean los pilares de todo progreso y para que en un ambiente de libertad, de bienestar y de independencia nacional se condene para siempre a la bohardilla de la historia, a la expoliación del hombre por el hombre y de los pueblos por el capital."

 


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